martes, 31 de enero de 2017

Ecstasy came in an incidental show


    Madrid era una cita esperada desde que supimos, allá por noviembre, del pack que conformaba la suma de Fleshgod A. más Carach Angren (de Holanda), a quienes se agregaban Nightland. Todo prometía pero... el batería de los primeros no pudo continuar el tour por una dolencia de espalda y se cancelaba la participación de F.A. Pero no el de las "support band".
      Y sí, éxtasis tras un accidentado show. Fuimos afortunados finalmente, pues pese a la cancelación del concierto de los cabezas de cartel, pudimos ver a los italianos Nightland con su Metal Extremo épico y bombástico con su set list de 40 minutos (7 temas) y a los zumbaos (con cariño) tulipanes Carach Angren, arrasando con su Metal de locura, horror y preciosas composiciones elaboradas y teatralmente interpretadas (una hora y pico).
     Trincando unos kankarros, nos llegó mensaje de un conocido de Madrid quien nos alertaba de la engorrosa situación. Estupor e incertidumbre. Luego apaciguados al saber que, en teoría, podríamos disfrutar de las actuaciones de los "teloneros". Ya vimos en el Leyendas 2.015 a los Flesh, por lo que si finalmente tocaban Carech Angren su set list completo y les acompañaban unos prometedores Nightland, podría ser también un buen plan, más teniendo presente la tesitura, pintando mal la cosa (del dicho al hecho...), y si nos devolvían la pasta íntegra de la entrada, pues mejor que mejor, como así fue. Bien por esa gestión rápida de la promotora (la ranita esta vez se portó...) y nuestro reconocimiento a la profesionalidad de Fleshgod Apocalypse, quienes por boca de su vocalista Tommaso Riccardi pedían disculpas a los allí congregados y permanecieron para luego hacerse fotos y firmar a sus fans.


               Tommasso Riccardi, compungido, se dirige a sus fans. Fue ovacionado.

      Apenas unas 200 personas se acercaron a la Sala Arena, quizá porque muchos iban a ver al grupo que se cayó, quizá porque el paquete no arrastraba a tanta gente. La cuestión es que vivimos el show de manera muy, muy tranquila, sin agobios aunque eso sí, con algo de fresquete en esa desangelada sala, con pésima acústica como ya comprobamos en visitas anteriores...



    Nightland venían a darse a conocer, al menos era mi caso. Tres cuatro temas previos, que me habían gustado, en una línea muy acorde con sus compatriotas F.A., con corales en buena parte de su música, arreglos orquestales (sin miembro a las teclas ya... lástima) y mucha tralla Death melódico/sinfónico, armaduras... rollo marcial también como impronta a sus canciones, un total de siete himnos que satisfizo a todos/as. 
Tres discos en su zurrón, y el último "Obsession" el que venían a mostrar en su primera incursión por Hispania.



Me quedo con "Icarus", con un espectacular coro envolvente que arropa la composición  y le da ese carácter genuino, épico a muerte, de B.S.O.; también con  "A.R.E.S." igualmente grandilocuente.
      Resaltar también la pegada del baterista, quien impulsaba desde el fondo del minúsculo escenario a sus compañeros, siendo soporte del abrumador sonido de estos cuatro legionari que con escaso repertorio seguro ganaron adeptos, entre los que nos incluimos. 



      Muy buenas sensaciones las dejadas por este combo, fotos con algunos de sus integrantes y camiseta y disco "Obsession" para el PaZillo.

                            Miguel M. "Vader", con Ludovico Cioffi, vocalista.

                              Con el guitarra, Filippo Scrima. un tipo muy cercano.

     La banda nos manda el set list. Agradecidos.

- Intro
- Dreamless life
- A.R.E.S.
- Obsession
- Icarus
- New song (tema nuevo aún no publicado)
- Last dance of a treacherous mind

   Desde que descubrí en la revista This is Metal a los holandeses Carach Angren, intuyendo que podría ser agrupación interesante, les di una oportunidad, y tras oír varios temas en la red y  disfrutar con sus clips (en especial el de "The funerary dirge of a violinist", sensacional guión y plasmación; puedes verlo más abajo) me cautivaron de forma especial y me pillé de una tacada sus cuatro álbumes, convirtiéndose en una de mis bandas favoritas ya.



Así que enorme interés por verles. Y no defraudaron para nada. Es lo que esperaba ver, una propuesta puramente teatral, dramática, con pasajes terroríficos (no en vano su obra se basa en eso, historias de terror y miedo), atmósferas de locura y delirio, y una tralla brutal pero sabiamente combinada con arreglos orquestales de órdago
     Set list de hora y pico, del que destacaría "There´s no place like home" (domestic violence!), "When crows tick on windows", con ese carrusel de efectos sonoros, giros, el interludio clásico magistralmente insertado que te atrapa, vuelta a lo pútrido... recuerdo que vimos este momento desde la parte trasera del recinto, desde otra óptica, siendo igualmente cautivadora la imagen que transmiten C.A. en vivo.



Comentar que Seregor, el vocalista, ya lleva como un par de años dedicándose en exclusiva al micro y la dramatización (en octubre 2.014 aún eran trío en directo, tocando él la guitarra), lo que le posibilita una actuación más vitalista, fresca y acorde a la idiosincrasia de la formación neerlandesa. Otro corte que nos cautivó fue "The Sighting is a portent of Doom" con esos pasajes de música clásica entremezclados con el exabrupto sonoro más horrendo y bello a la vez.

"Es lo que esperaba ver, una propuesta puramente teatral, dramática, con pasajes terroríficos y orquestaciones de órdago"



    "Two flies flew into a black sugar cobweb" nos dejó también buenas vibraciones y una más, "Bloodstains on the captain´s log", con la que cerraron show.
      Su nutrido grupo de fieles alucinó desde luego con la fantástica puesta en escena de una banda que ha crecido una barbaridad en los últimos dos, tres años y que seguirá haciéndolo, seguro que gracias no sólo a sus magníficas creaciones sonoras sino también por saber plasmar su arte de estudio sobre un escenario. Nos fuimos muy contentos del concierto, sin merchand camisetero de C.A. porque ya están agotando existencia (llevábamos una del mercado asiático bastante apañá) y con la esperanza de volverles a ver no muy alejado en el tiempo.
     Y también satisfechos en cómputo global con las dos actuaciones, el trato de los músicos y la visita a la capital, con mi buen amigo Miguel M. "Vader" (un abrazo, PulpoKreator, y gracias)


Con Seregor, puro nervio teatral.

Con Namtar, y el Maestro de Ceremonias Terroríficas, Sir Clemens "Ardek" Wijers.

Muy amablemente, y raro en una banda grande, Carach Angren encarnados en su líder Clemens "Arderk" Wijers nos facilitan su puesta de gala en Madrid. Aquí su set list. Dank je!


Once upon a time 
There's no place like home 
Lingering in an imprint haunting 
Departure towards a nautical curse 
When crows tick on Windows 
Spectral infantry battalions 
Bitte tötet mich
Sir john 
Electronic voice phenomena
The Sighting is a portent of Doom
Two flies flew into a black sugar cobweb 
The ghost of Raynham Hall 
Haunting echoes from the seventeenth Century
Bloodstains on the captain's log 

    Pensamos que una parrafada sobre lo que nos pareció el bolo es poco ilustrativo de la naturaleza de las bandas protagonistas (también incluiremos a Fleshgod quienes estuvieron a la altura "en el despacho"). Así que os dejamos varios videos que consideramos representativos del buen hacer de estos artistas. Disfrutadlo y quedad prendados: "His brillant music, so beautiful and pure..."



   Una obra maestra. Una historia sorprendente, dramática y a la vez emotiva y bella, ambientada en la II G.M. "La endecha funeraria de un violinista" (endecha es un canto, canción triste, lamento fúnebre, con una métrica peculiar  empleada en composiciones de asunto luctuoso)

Sensacional lyric video donde poder ver a C.A. en vsu máxima expresión: historias de terror bien hiladas y con su música como banda sonora. 

                         "The Sighting is a portent of Doom", avistando el destino...
                                           

                                 "Icarus". Los italianos Nightland volarán alto...



   Para nada fue un epílogo... Volverán como mito con su música grandilocuente.

   Más fotillos:






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